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Osteopatía
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La osteopatía es una medicina manual no invasiva y no farmacológica que se centra en la integridad estructural y funcional del cuerpo mediante el diagnóstico y tratamiento manual de los diferentes sistemas corporales y que considera el movimiento humano como algo fundamental para la salud y el bienestar. Se basa en la unidad del cuerpo humano y la psique, así como en la interactividad entre los diferentes sistemas del cuerpo humano y también con el exterior. 


La osteopatía se basa en la idea de que el cuerpo humano tiene la capacidad inherente de autorregularse y sanarse. El sistema musculoesquelético, incluyendo los músculos, huesos, articulaciones y tejidos conectivos, están estrechamente interconectados con otros sistemas del cuerpo, como el sistema nervioso, circulatorio y linfático. Por lo tanto, cualquier disfunción en el sistema musculoesquelético puede tener efectos en otros sistemas y en la salud en general.


La osteopatía utiliza en un enfoque holístico para el tratamiento, considerando al paciente en su totalidad en lugar de centrarse solo en la parte afectada. Utiliza técnicas manuales y manipulativas para evaluar y tratar las disfunciones musculoesqueléticas, como la manipulación articular, el estiramiento muscular, la movilización de tejidos blandos y otras técnicas específicas.


Se trata de una disciplina sanitaria basada en los principios de la fisiología, la anatomía, la embriología y otras ciencias biomédicas.

La osteopatía es una disciplina manual, diagnóstica y terapéutica apta para cualquier persona y edad que no tiene contraindicaciones ni efectos secundarios.



Cristina de Gracia González | Osteópata y fisioterapeuta


La osteópata de nuestro equipo de Q-KINESIS tiene como objetivo mejorar la salud del paciente para llegar a un estado de equilibrio y bienestar. Para ello, se busca el origen del problema y mediante una historia clínica completa, un diagnóstico preciso, un tratamiento personalizado adecuado y las recomendaciones necesarias para el día a día del paciente se consigue solucionar el motivo de consulta y mejorar su calidad de vida recuperando su estado de bienestar. Después de la sesión de osteopatía se necesita un tiempo para que el cuerpo del paciente se adapte y llegue a su curación. Dentro del tratamiento hay multitud de técnicas que se elegirán en función de las características del paciente (enfermedades, embarazo, edad, sexo…) y de la naturaleza de la lesión o disfunción (estructural, visceral…): técnicas miofasciales, técnicas viscerales, manipulaciones articulares y vertebrales, movilizaciones, técnica craneosacral…


¿En qué casos viene bien la osteopatía?


1. Lesiones tanto deportivas como traumáticas: tendinitis, epicondilitis, esguince, luxaciones, contracturas musculares, rotura de fibras, latigazo cervical…

2. Dolor de cabeza, cefalea, migrañas, vértigos, mareos…

3. Sinusitis, rinitis, otitis, problemas oculares, bruxismo, patologías de ATM…

4. Dolores de cuello y espalda: Cervicalgia, cervicobraquialgia, tortícolis, dorsalgia, lumbalgia, problemas discales y hernias discales, escoliosis, ciática, cruralgia, artrosis…

5. Problemas digestivos: reflujo, hernia de hiato, gastritis, úlceras, diarrea, estreñimiento, enfermedad de Crohn, colón irritable…

6. Problemas uroginecológicos: alteraciones hormonales, dolor menstrual, cistitis de repetición, incontinencia urinaria y/o fecal, vaginismo…

7. Antes del embarazo, embarazo y postparto

8. Bebés y niños: cólico del lactante, problemas de sueño, estreñimiento, tortícolis congénita, plagiocefalia, llanto excesivo, escoliosis, hiperactividad, falta de concentración, problemas de pisada…

9. Recuperación postquirúrgica, cicatrices, fibromialgia, cansancio, estrés, ansiedad, insomnio…


Para bebés, niños y adultos


Osteopatía pediátrica


La osteopatía pediátrica o infantil es una rama de la osteopatía que se enfoca en la evaluación y tratamiento de problemas de salud en bebes y niños. Soluciona las alteraciones en los niños derivados del embarazo, del parto y del postparto.


El parto, genera un estado de estrés en el bebé. El canal del parto es estrecho, las contracciones generan presión constante sobre ellos, la salida al exterior… respirar por sí solos… es algo nuevo, por ello, es recomendable hacer una valoración al bebé después del parto, ayudándole a mejorar posibles molestias que pueda tener tras este proceso o simplemente a adaptarse al nuevo entorno.


Las posiciones mantenidas en el útero de la mamá o el paso por el canal del parto hacen que el bebé este sometido a fuerzas compresivas en todas las direcciones pudiendo afectar a su simetría craneal y a cualquier otra parte del cuerpo.

Esto se debe a que los huesos del bebé sobre todo en el cráneo pueden deformarse fácilmente y aunque posteriormente se remodelan naturalmente hay veces que esto no sucede . Estas fuerzas de compresión pueden afectar negativamente sobre todo en partos largos, difíciles o que han necesitado instrumentación como las ventosas o fórceps.


Si no se tratan a tiempo, las tensiones del embarazo o del parto que han afectado al cuerpo del bebé pueden convertirse en problemas durante la infancia y la edad adulta a la consulta de osteopatía


Es importante destacar que la osteopatía pediátrica se enfoca en técnicas muy suaves y seguras, adaptadas al cuerpo en crecimiento y desarrollo de los niños. Los osteópatas pediátricos suelen trabajar en colaboración con otros profesionales de la salud, como pediatras y médicos de familia, para proporcionar una atención integral y completa a los niños.


La efectividad demostrada de la osteopatía pediátrica hace que cada vez más padres confíen en esta terapia.

El tratamiento de osteopatía infantil se lleva a cabo de forma manual, con técnicas muy suaves e indoloras respetando el tejido y las estructuras del bebe o del niño para obtener cambios profundos que equilibran los sistemas nervioso, inmune, muscular y digestivo entre otros, permitiéndoles funcionar con normalidad.


¿Cuándo llevar a mi hijo a un osteópata pediátrico?


Se recomienda que el bebé reciba una sesión de osteopatía pediátrica de forma preventiva los primeros días de vida para ver su estado global y evitar este tipo de problemas. En el caso de que exista alguna disfunción, cuando se tratan de forma temprana, tienen mejor pronóstico. En niños normalmente es recomendable realizar revisiones de forma periódica cada dos, tres meses para comprobar que su desarrollo se está realizando correctamente.


Existen unos signos de “alarma” que nos ayudarán a saber si debemos acudir a la consulta de osteopatía. Estos son:


  • Tiene reflujo después de cada toma.

  • Tiene dificultades para tragar o de succión.

  • No se agarra bien al pecho.

  • Tiene problemas digestivos tales como el estreñimiento, diarrea, hacer fuerza al defecar…

  • Tiene la tripa hinchada y dura.

  • Tiene muchos gases.

  • Si hay vómitos.

  • Problemas para dormir y alteraciones del sueño.

  • Irritabilidad y lloro sin motivo aparente.

  • No lagrimea por un ojo.

  • Se chupa el pulgar constantemente, o se toca siempre un lado de la cabeza.

  • No gira la cabeza hacia uno de los lados o tiene preferencia por girar la cabeza hacia uno de los lados.

  • Si tiene zonas planas en el cráneo o asimetrías faciales (ej. un ojo más pequeño que el otro).

  • Si sufre estrabismo.

  • Tiene problemas respiratorios e infecciones frecuentes, bronquitis u otitis.

  • Tiene dificultad para gatear.

  • Si el parto fue largo, difícil con fórceps, ventosa o por cesárea.

  • Si tiene dolores de espalda, escoliosis o alteraciones en las rodillas.

  • Si tiene dificultad para la concentración , el lenguaje y el aprendizaje y alteraciones de comportamiento.

  • Si tiene dolores de cabeza.

  • Tiene disfunciones odontológicas y/o oftalmoloógicas

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